Una de las miles de veces que te he querido.
Grítalo fuerte, escríbelo en el cielo y grita, mucho, mucho más, dí quien eres y todo lo que vales que eres fuerte y ya no te vas a derrumbar.
En el momento en el que tu para mi lo eres todo y yo para ti no soy nada me doy cuenta de que algo esta saliendo mal.

miércoles, noviembre 9

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No pensaba dejarte nunca, pensaba en que lo nuestro sería eterno, porque aun recuerdo que decíamos "a donde vayas voy", tantos deseos que gritamos a los cuatro vientos, de los cuales la gran mayoría volvieron y chocaron contra nuestra realidad, contra lo nuestro. Sentía que la compañía que nos producíamos no era para nada cómoda, tus ojos ya no eran míos y me invadían los celos, odiaba a todas aquellas que invadían tu espacio, ese que antes solo compartías conmigo, pero ahí es cuando venias y me demostrabas que no había nada de lo que preocuparme, me llenabas de mil escusas y me mirabas como antes, me dolía tanto verte llegar así, porque yo te quería como a nadie. Fui yo quien cometió el mayor error lo sé, por decir lo que no sentía, pero no deberías haber pensado que iba a esperarte toda la vida, después de todo te ibas olvidando de mi poco a poco a pesar que me encontraba a tu lado siempre, para ti siempre hubo algo antes, algo con mayor prioridad que yo. Pero tranquilo, estas son solo palabras, después de todo, siempre hago esto, no decirte lo que realmente siento.

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